Alejamiento de la proteína bruta: Más pruebas
Esta idea no es nueva para los lectores del blog de Insta-Pro, sin embargo, la finalidad de esta publicación es explicar, desde mi punto de vista, las últimas pruebas que demuestran que depender demasiado de los valores de la proteína bruta usando una antigua técnica de medición que surgió aproximadamente en el año 1800 es una mala idea.
A modo de repaso, considere lo siguiente:
- Son los aminoácidos individuales que crean las proteínas en las dietas los que se convierten en tejidos animales.
- Medir la cantidad de cada aminoácido individual en los ingredientes permite formulaciones dietéticas mucho más precisas.
- Todavía más importante, debe usarse el contenido digestible de aminoácidos en cada ingrediente, el cual indica la utilidad para fines productivos, y no la cantidad total, la cual podría no estar relacionada de ningún modo con la cantidad digestible.
- Suministrar aminoácidos en las dietas es siempre caro. La mayoría de las evaluaciones indican que, por unidad, la proteína es el componente más caro de las dietas.
- Un suministro excesivo de aminoácidos no solamente será un despilfarro sino que además puede resultar perjudicial para el rendimiento del animal.
Un artículo publicado recientemente es la última evidencia a lo anteriormente mencionado y transmite el mismo mensaje: debemos dejar de basarnos en los valores de las proteínas brutas.
El artículo en cuestión usó un conjunto de datos sobre los aminoácidos en harina de soya básica extraída por solventes y los comparó con los niveles de aminoácidos individuales de los valores de la proteína bruta. Los datos se expresaron en base a la materia seca, en parte probablemente para minimizar la corrupción de los datos y también la harina de soya que contenga mucha agua, normalmente entre el 11 y el 12 %.
Los autores del estudio usaron distintas técnicas de modelado pero no fueron capaces de generar una fuerte correlación entre los niveles de proteína bruta y los aminoácidos individuales. Por ejemplo, el valor2 R para la lisina nunca superó 0,51, lo cual indica una correlación muy débil y una mala adaptación del modelo. En resumen, la cantidad de proteína bruta en la harina de soya a penas está relacionada con la cantidad total de lisina.
Por lo tanto, al formular una dieta, ¿debe añadir 5 o 15 lb de L-lisina a la dieta? Si se basa solamente en la proteína bruta, lo más probable es que falle.
Al evaluar los ingredientes, merece la pena ir más allá de la proteína bruta. ¿Puede un ingrediente de mejor calidad como la harina de soya extruida en seco con alta fricción y parcialmente desaceitada, la cual puede tener menos proteína bruta, compensar la diferencia con la mayor digestibilidad de aminoácidos?? Hable con nosotros si desea obtener más información.